¿Alguna vez te has preguntado por qué las personas mayores de 40 años necesitan lentes para ver de cerca? Si es así, te confirmamos que hay un único culpable: la presbicia.
La presbicia es la perdida normal de la habilidad de enfocar a corta distancia, la cual ocurre conforme envejecemos. Los síntomas comienzan a partir de los 40 años, el más característico es cuando tienes que sostener lo que quieres leer un poco más lejos para lograr enfocar las letras.
Por más que no hayas usado lentes en toda tu vida, no se puede escapar de la presbicia. Por otro lado, los miopes notarán que, incluso usando sus lentes de medida, verán borroso de cerca. Este cambio en nuestra visión viene acompañado de un fuerte componente emocional, ya que es un signo del inevitable envejecimiento.
La presbicia es una consecuencia del paso de los años. Todos tenemos un lente dentro del ojo llamado cristalino, mientras somos jóvenes este cambia de forma rápida y sin dificultades, dependiendo si tiene que enfocar cosas de lejos o de cerca. Con el paso del tiempo, el cristalino pierde su flexibilidad y tiende a engrosarse, lo cual hace más difícil (o imposible) que se acomode para realizar actividades que requieran visión de cerca, como: leer, pasar una aguja, etc.
Sí, la presbicia puede tratarse con tres tipos de lentes: de lectura, bifocales y progresivos (también llamados multifocales). Otras formas menos comunes de tratamiento, usadas por personas que no desean usar lentes de medida, son: lentes de contacto multifocales y algunos tipos de cirugías.
Lentes progresivos:
Los lentes progresivos son la forma más popular para tratar la presbicia. Estos lentes tienen tres campos de visión que cambian de manera progresiva a lo largo del lente. En la parte inferior del lente se encuentra la parte que ayuda a recuperar la visión de cerca. Mientras que el medio de la luna es usada para una visión intermedia. Por último, en la parte superior se encuentra la sección para recuperar la visión de lejos.
Lentes bifocales:
Los lentes bifocales solían ser el principal producto con el que se trataba la presbicia. Estos lentes tienen una separación notoria en la parte inferior de las lunas, la cual permite recuperar la visión de cerca. Mientras que el resto de la luna es la que se usa para la visión de lejos. Los bifocales dejaron de usarse debido a que tienen un rango de visión más limitado en comparación a las lunas progresivas.
Lentes de lectura:
A diferencia de los lentes progresivos y bifocales, que pueden ser usados durante todo el día, los lentes de lectura se usan solo en el momento en el que se quiere leer o realizar alguna actividad que requiera enfocar la visión de cerca. Este tipo de lentes es recomendado para personas que no tienen problemas para ver de lejos, o para personas que usen lentes de contacto.
Normalmente, junto con la presbicia, las personas se vuelven más sensibles a la luz. Para contrarrestar esto se puede optar por los lentes fotocromáticos. Estos se oscurecen ante la presencia de la luz y se aclaran en su ausencia. También se recomienda escoger lunas con antireflex, ya que permiten que más luz llegue a tus ojos, con lo que se logra una visión de mayor claridad.
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Para saber más sobre estos tipos de lentes puedes leer:
- Lentes bifocales: ventajas y desventajas
- Lentes progresivos: ventajas y desventajas
- Lentes progresivos, ¿son mejores que los bifocales?
- ¿Los lentes progresivos son los indicados para ti?
Fuentes: allaboutvision.com, allabouteyes.com, zennioptical.com, healthline.com, webmd.com y aao.org.
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