Si eres de los que usa lentes de medida desde pequeño, es muy probable que en más de una ocasión se te haya roto la montura o rayado las lunas. Esto no causa ninguna sorpresa si te pones a pensar que los lentes son algo que usas más que tu celular, ya que los tienes puestos todo el tiempo que estás despierto. Casi todo el día están expuestos a tu torpeza cualquier accidente que pueda ocurrir. Para evitar accidentes que te hagan doler la billetera, no está de más tener siempre presente los siguientes consejos para el cuidado de tus lentes.

La limpieza es obligatoria.

Para que tus lentes tengan una larga vida tienes que mantenerlos limpios. Una o dos veces por semana, lava las lunas con un poco de agua y jabón neutro. Luego, sécalas con el paño de microfibra que Optimania te regala.

Ojo: Si tu montura es metálica evita mojarla en exceso.

Fórmula secreta de Optimania: tres partes de alcohol (el que venden en las farmacias) y una parte de agua 1 o 2 gotas de jabón para platos. Mezclar todos estos ingredientes y listo.

Nunca usar: vinagre, limpia vidrios o pasta dental.

Utiliza solo paños de microfibra.

Utiliza solo el paño de microfibra que viene de regalo para limpiar las lunas de tus lentes. Otros paños por suaves que parezcan pueden rayar la superficie.

El estuche es el mejor amigo de tus lentes.

Cuando no uses tus lentes procura guardarlos siempre en su estuche, para ello vas a tener que tenerlo siempre a la mano. Procura tener varios estuches: uno para la casa, uno en tu mochila o cartera, otro en el carro, etc.

No cojas tus lentes por las lunas.

Sujeta siempre las gafas por la montura, así evitaras ensuciar las lunas.

Usa ambas manos para quitarte y ponerte los lentes.

Quitarte y ponerte los lentes con una sola mano desgasta mucho más rápido las patillas. Lo más recomendable es usar ambas manos, una en cada patilla para ponerte o sacarte las gafas.

Evita dejarlos expuestos al sol.

No coloques tus lentes de medida cerca de una fuente de calor, en el interior de un vehículo o expuestos directamente al sol. El calor puede deformar la montura por la dilatación de los materiales.

Si vas a hacer deporte, usa lentes deportivos.

Si no puedes vivir sin hacer deporte y, al mismo tiempo, no puedes ver nada sin tus lentes, lo más recomendable es usar lentes deportivos con medida. Los lentes de uso cotidiano se te pueden caer y arruinar. Además, pueden ser un peligro para tu propio rostro, ya que no cuentan con los protectores necesarios.

Esperamos que siguiendo estos consejos puedas alargar la vida útil de tus lentes de medida.

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